domingo, 13 de febrero de 2011

No es personal (basado en hechos reales)

Mira, te voy a destrozar la vida, pero no es personal. Así son las cosas, esto es el mundo del trabajo. Pero esto es aquí, en la oficina. Verás, tengo que putearte. Resulta que voy a sobrecargarte de trabajo y luego yo me llevaré los méritos. Pero no te creas que tengo algo contra ti, por favor, nada más lejos de la realidad, incluso me caes bien. Mira, si quieres nos vamos de cañas después del trabajo, porque me caes bien. Esto no es personal, ya sabes, el trabajo es así. Esas fantasías tuyas de la honradez, la honestidad, la coherencia. Necesitas madurar, en serio. Así no vas a llegar a ningún sitio.
Y esto te lo estoy diciendo por tu bien, porque te aprecio. ¿Cómo? ¿Que esparcí rumores falsos sobre ti? Ya, pero ya te lo he dicho, eso no es porque me caigas mal, es que si no lo hacía te ascendían a ti en vez de a mí, y yo quería ese ascenso. Mira que te lo digo veces: no es nada personal. Esto son cosas del trabajo. En todas las empresas te vas a encontrar con lo mismo. Madura ya de una vez y no te pongas en plan histérico, ¿es que estás con la regla? ¡Ah! que te molesta que te haya degradado para ascender a ese inepto... es que las mujeres sois de una manera... De verdad, no se puede trabajar con vosotras, sois una olla a presión de hormonas y saltáis por cualquier cosa... Mira que molestarte porque le haya dado a ése el puesto que te he estado prometiendo durante un año, a ése, que tiene menos formación que tú y que encima va a cobrar el doble... por cierto, le tendrás que echar una mano porque, claro, no sabe lo que tiene que hacer, en cambio tú, que lo has estado haciendo extraoficialmente un año.... ¿cómo? ¿que por qué le he dado entonces a él el puesto en vez de a ti? Mujer, es obvio. Tú no tienes madurez para desempeñarlo, te falta picardía, frialdad, tú ya me entiendes. Eres demasiado subceptible, serán las hormonas, no es culpa tuya, las mujeres ya se sabe...
Haces muy bien tu trabajo, por eso te he encargado siempre las tareas más difíciles, sabía que no me defraudarías. Son otras cosas las que tienes que cambiar, no sabes estar en el lugar que te corresponde. ¿Qué son esas simpatías, por ejemplo, con la de la limpieza o el repartidor? Así no te van a tomar en serio.
Bueno, ya sé que estás en tratamiento por las putadas que te he hecho, pero yo todo lo he hecho por tu bien, quien bien te quiere te hará llorar. A ver si maduras de una vez y dejas de ser buena persona y buena compañera, que por ese camino nunca llegarás a nada en el mundo empresarial.
Y que conste, sobre todo, que no es nada personal.