martes, 6 de marzo de 2012

Poli corrupto, papi violador



¿Os habéis fijado en que en las pelis de dar miedo el malo malísimo siempre resulta ser uno que se suponía de los buenos?


El policía corrupto siempre me ha dado mas miedo que el delincuente. Si te ataca un delincuente vas la policía, pero ¿A dónde vas si te ataca la policía? Lo mismo pasa con los padres que abusan de sus hijos. Es muy jodido que te violen, pero si encima te viola el tipo del que se espera que reviente a hostias a quien te hace daño es devastador.


Tengo miedo porque he comprendido que estamos siendo violados por nuestro padre y, encima, el policía al que se lo hemos ido a contar es corrupto.

Siento indefensión, no sé a dónde acudir, no sé cómo luchar contra quien me ataca. Tengo incluso miedo de pensar.


Ahora resulta que Oceanía nunca estuvo en guerra con Eurasia

Vivimos la peor de las esclavitudes: la del que cree ser libre.


Cuando de pequeña las monjas intentaban adoctrinarme con la historia de Luzbel, el ángel caído, solía preguntarme si no habría ganado en realidad el malo y, como todo vencedor, contaba su versión de los hechos.


Ahora no me cabe ninguna duda.








No hay comentarios: