sábado, 12 de abril de 2008

¿DEFINICIONES O MEDITACIONES?


¿Qué es la soberbia? Hace tiempo que intento definirla. Empecemos poco a poco. Sé que es uno de los siete pecados capitales, y el diccionario la define como el “amor desmedido por uno mismo”. Sé que es algo negativo y, sin embargo, cuando algo es mejor que bueno decimos que es soberbio. Sé que, junto con la lujuria, es el único pecado del que los pecadores se vanaglorian, aunque esto es lógico si lo pensamos bien, si soy soberbio no percibiré la soberbia como algo negativo, ya que es algo que forma parte de mí, y si soy soberbio nada que forme parte de mí me podrá parecer jamás negativo.

Estudiemos los otros pecados capitales. Podríamos dividirlos entre los carismáticos y los no carismáticos. Ser lujurioso, iracundo o soberbio es atractivo para los demás, atractivo como el adolescente que se salta las clases, como el primer cigarrillo, como el humor cruel, posee la belleza de la maldad. También podríamos decir que ser lujurioso es tanto como ser sensual, ser iracundo tanto como ser fuerte, ser soberbio tanto como ser superior a los demás. Sin embargo, qué triste ser dominado por la gula, por la pereza, por la fea avaricia y no digamos por la envidia. Este último es, sin duda, el menos carismático y confesado de los siete. La envidia. ¿Quién en su sano juicio confesará ser envidioso? Sería lo mismo que admitir que tenemos algo que envidiar, y eso sería lo mismo que admitir nuestra inferioridad.

No sé, entonces, por qué de un tiempo a esta parte la envidia y la soberbia se me confunden, no alcanzo a distinguirlas. ¿No será que, en el fondo, son lo mismo?

¿Qué es la nostalgia? Esto no lo he mirado en el diccionario, pero, ya que nunca se me dio mal definir palabras, me atreveré a decir que es algo así como “la mezcla de alegría y pesar que nos produce el recuerdo del pasado”. Creo que esta definición me ha quedado bastante bien. Pero yo diría más cosas, si tuviera que definirla de un modo más personal. Yo diría que la nostalgia es la enfermedad de quienes nos negamos a aceptar lo efímero, de quienes tememos a la decrepitud y la muerte. La nostalgia es querer volver a tiempos pasados, sin tener en cuenta si éramos más felices o no. La nostalgia es mirarte, mirarnos y no poder soportar esta supuesta perfección de vida, esta cuestionable felicidad. Es querer volver a mi miseria, en la que me encuentro tan a gusto, en la que sé lo que me hago, en la que estoy como pez en el agua. La nostalgia es el deseo de la tristeza profunda de los que ya hemos descubierto que sólo la tristeza profunda encierra la felicidad de esperar que llegue la felicidad.

¿Qué es lo absurdo? Seré sincera, esto ni lo he mirado en el diccionario ni me siento con fuerzas para intentar definirlo de forma objetiva. Vamos, pues, con la definición personal. Lo absurdo es una ciudad reconstruida a imagen y semejanza de lo que fue, y yo en esa ciudad intentando parecerme lo menos posible a lo que fui y, no nos engañemos, soy y siempre seré.

Escrito en Dresde el 1 de mayo de 2005

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Menuda mierda.

cojoiden dijo...

si no te gusta mi blog no lo leas, igual que yo no leo el tuyo, pero dejame en paz

Anónimo dijo...

El título del post es fenomenal en sí mismo. Cualquier definición objetiva se puede ver subjetivamente. Soberbio por ejemplo puede ser grandioso y magnífico; estupendo para los objetos, pero en las personas ¿no esperaríamos que fuera emparejado con la humildad? Con el resto de los pecados capitales sería parecido. Es humano sentir todas esas cosas pero necesitaríamos relativizarlas.

cojoiden dijo...

Bienvenida al blog María y gracias por el comentario.

Sargento de instruccion Hartman dijo...

A ver... a mi todo esto me parece educativo... pero falta hablar de culos, tetas o en su defecto M-16 y tanques.

No se, soy un sentimental... y esas cosas me enternecen a la vez que me endurecen... eso es contradictorio, pero yo lo llamaria priapismo.

cojoiden dijo...

sargento, yo no doy para más, si pudiera hacer un blog tan genial como el suyo no haría este... pero gracias por comentar, por cierto, cuando le hicieron la foto?

Sargento de instruccion Hartman dijo...

No se preocupe Srta Cojoiden, para hacer un blog como el de los habitantes del Páramo hay que estar muy enfermo... ud puede que aun tenga una oportunidad para ser normal, nosotros estamos ya condenados.... pero no se aflija por nuestras almas, que de eso no gastamos... somos unos hijosdeputa y nos encantamos.

En cuanto la foto... estaba dudando en poner esa y la de mi prepucio con un sombrero del 7º de caballeria...... aunque soy un marine de pelotas de acero tengo inquietudes artísticas.