Dos perros servían al mismo amo. El amo les daba una chuleta al día para comer. Los perros eran grandes y hubieran necesitado una chuleta para cada uno. Se peleaban entre ellos por la chuleta. No se daban cuenta de era el amo quien tenía muchas más chuletas, y entre los dos hubieran podido vencerle si se hubieran puesto de acuerdo.
2 comentarios:
Especialmente dedicada para los empleados de Espahotel Gran Vía, con cariño
Después de analizar el minicuento, y tragar con que se trata de dos perros muy grandes cuyo amo tiene muchas más chuletas... he llegado a la conclusión de que el amo lo que es, un hijo de la grandísima puta jaja.
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